La vida loca me ha envuelto y me perdí por un momento en el tumulto. Tanto que el miércoles pasado–mi miércoles no el tuyo, por la circunferencia de este planeta, etc–tuve que parar. Es como cuando uno cruza la calle: todo se detiene, mirada a la derecha, mirada a la izquierda, y si nada viene ponemos un pie atrás del otro.

Bueno, estaba en que tuve que parar porque la cabeza me iba a explotar. Artículo aquí, modelos hedónicos por allá, regresión logística por acullá y sin tiempo para respirar. Pero entre todo eso, estaba leyendo Genius, una biografía de Richard Feynman, premio Nobel de física del año sesenta y cinco. Un libro extraordinario sobre un personaje increiblemente inspirador. Me sentí tocado, pero no me malentiendas estimado lector. No es que uno trabaje en física, o se crea un genio, o que vaya a ganar el premio Nobel, o que alguien piense en escribir una biografía pensando en uno. Pero me sentí tocado porque, bueno, uno está en la misma: haciendo investigación para entender como funciona el mundo. En otra disciplina, a otro nivel, con diferentes preguntas, pero con la misma curiosidad.

A veces vienen esas etapas en que uno no sabe que hacer. ¿Cuál es el problema? ¿Dónde voy con este ensayo? ¿Estoy perdiendo el tiempo? Dudas, dudas… Pero justo uno encuentra esto:

He showed Bethe what he had discovered.
– But what’s the importance of that? Bethe asked.
– It doesn’t have any importance, he said. I don’t care whether a thing has importance. Isn’t it fun?
– It’s fun, Bethe agreed. Feynman told him that was all he was going to do from now on–have fun.

Y es que la vida me envuelve y paro de jugar, de pasarla bien. Se me olvida que estoy en esto porque es entretenido, porque es un juego. ¿Cuándo fue la última vez que jugué a empañar los vidrios de un tren?

fromTrainWindow.jpg
Vaho en una ventana de tren (Foto: Luis).

Creo que debería terminar este post con una cita de Feynman, que es aplicable a cualquier trabajo de investigación.

Physics is like sex. Sure, it may give some practical results, but that’s not why we do it.

La Física es como el sexo. Seguro, puede tener utilidad práctica, pero no es por eso que lo hacemos.

De vuelta a trabajar y a pasarla bien.