Vienes tarde otra vez, como tren de carga

Month: November 2009

Olvidalia

Viajando entre templos de madera, con columnas que demoraron siglos en extenderse diametral y longitudinalmente, trato de entender las barreras. ¿Por qué paramos antes de llegar a la cima? ¿Por qué tratamos de resolver el mismo problema de la misma manera, una y otra vez? (Huelga decir que infructuosamente).

Los templos tienen un extraño simbolismo, porque esos muros representan nuestras fallas, nuestras taras. Esos mismos muros contienen una inscripción que traduzco torpemente:

No son cosas externas las que nos restringen, sino nuestras mentes que se aferran a cosas que nos restringen — Ryōshun Nakano.

El problema es que si olvidamos las restricciones puede que resolvamos los problemas: toda una industria del pesimismo al tarro de la basura.

Caminando en Kyoto (Foto: Luis).

Un encuentro notable en mi memoria

Hace mucho tiempo deje de verla….hace mucho tiempo.

Conversaciones a orillas de cunetas, en asiento de micros y de borde de zarza mora es lo que recuerdo. Poesía, las nuevas revoluciones y el fresco futuro cercano eran nuestros temas predilectos.

Solo miedos a decir las verdades que pudieran arruinar los hilo abierto de la vida.

Lo que recuerdo es una gran sonrisa detrás de una morena cara de princesa de ojos grandes a velocidad San Eugenio y de Recoleta. Una mirada altiplanica como la mia. Inca, Aimara, Diaguita bajo los designios de miles de pueblos y árboles antiguos.

Hace mucho tiempo que ya no recuerdo su cara.

Solo tengo destellos pálidos, elctricos y suaves.

Como una gran sinapsis axo-dendrítica que se traslada entre mis sentidos.

A pasos de una e-volución de las ideas

Queridos amigos.

Yo se que es raro que reciban un e-mail de mi parte, pero les escribo por algo que considero muy importante y por lo cual he meditado más de un rato.

No puedo dejar pasar los últimos sucesos sociales que día a día nos enrostran la gran desigualdad que estamos generando en nuestra sociedad próxima, la que yo llamo muestro espacio- paisaje.

Esta desigualdad que les hablo se aparece frente a nosotros en diferentes formas e intensidades. Por ejemplo, el último paro de profesores que deja a los jóvenes más pobres de nuestro espacio-paisaje más lejos aún de una opción que les permita disminuir su heredada marginación. Se que en cinco días no se salvan 4 años de educación, pero ésto es una gota que representa al mismo mar de la marginación de un sector importante de los nuestros.

Como no revelarme frente al hecho de que niños y jóvenes que veo a diario en las calles, son secuestrados por las ideologías, los dogmas, las revindicaciones (justas o no), la torpeza de una administración pública y sobre todo por los intereses particulares de gremios y funcionarios!. En esos momentos de terrible secuestro, se les paga con turnos éticos distorsionanado prufundamente el sentido de esa hermosa palabra.

Lo peor de todo esto, es que ocurre frente a mi, frente a ustedes y nosotros y no somos capaces de hacer mucho por evitarlo. Estamos cómodamente anestesiados en nuestros cómodos sillones que dan a una terraza y a un prado verde.

Leía en un diario sobre la cantidad de meses de clases que han perdido los niños y jóvenes más pobres de nuestro espacio-paisaje. Las cifras, más o menos, son abismantes. Un niño que entró a enseñanza media el año 2006 ha perdido cerca de 7 meses de clases. Los que estudiamos en la U de Chile sabemos que la recuperación como concepto al final lleva implícito una pérdida muy grande.

El tema no es 7, 4 o 3 meses. Es la pérdida del sentido de la educación, la perdida del sentido de conocimiento y sobre todo, la pérdida del sentido de si mismos que finalmente genera un espacio-paisaje desigual y no vivible.

Es injusto negar los esfuerzos realizados por nuestro estado y muchas, muchas personas. Pero se necesita 100 veces más de esfuerzos.

La sociedad frente a la catástrofe se reconstruye a si misma como sociedad. No es solo el estado el reconstructor, sino que la sociedad hacia la sociedad. Son las nuevas redes de colaboración que solo se generan por la catástrofe las que nos hacen salir de la catástrofe como catalizadores en una reacción química.

Eso creo que necesitamos. Acciones que catalicen, acciones que descompriman, acciones que sobre otras acciones ayuden a que recompongamos la educación, la salud, la valoración del otros y en si nuestro espacio-paisaje

Y en concreto que hacer? O en concreto, como no vamos a poder hacer algo desde nuestra linea de horizonte?

Este año tuve una gran experiencia con un proyecto de forestación urbana. Partió como una idea-obsesión-ilusión en tren de carga el año 2007 y ahora esta diseminada por muchas partes y por mucha gente muy diferentes, aportando a lo operativo y lo legal del problema de árboles en nuestras ciudades (nosotros los del proyecto no hicimos mucho y fuimos más un catalizador de ideas).

Yo creo que ustedes pueden tener muchas buenas ideas en relación a la educación y sería bueno compartirlas, discutirlas y por que no ejecutarlas para ayudar a salir rápido de la catástrofe muchos niños y jóvenes. Es decir, los invito a que nos juntemos a virar nuestro espacio paisaje hacia otro mejor rumbo.No tengo claro como y cuando pero depende de nuestras voluntades (algo tengo en mente en todo caso!).

Pienso en una e-volución de las ideas. Sin dogmas y doctrinas, solo un hervidero de pequeñas ideas y de pequeñas acciones catalizadoras y efectivas. Como el espino que de sus millones de granos de polen que lanza al aireo solo quedan algunos frutos dispersos, pero que son fundamentales.

Un abrazo de piedra para ustedes y espero sus respuestas.

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