A la entrada de los sueños esta el descanso.
Como una boca que se transforma en un largo beso casual e inesperado.
Solo los dioses lo saben:
Es el descanso Ecuatorial que llega a los pies desde las aguas de un mar en invierno aumentado
Vienen entonces los sueños que se posan sobre mis hombros a espacios milenarios.
Leave a Reply