4:40 pm y comienza la lluvia inesperada en la montaña.

Correr por la carretera. Tu detienes el auto que como salvavidas me tiende la última mano frente al abismo.

No quería ahogarme en la tormenta ni bajo el ruido de relámpagos interminables y desconocidos.

Las frutas se compran frescas en la Plaza Mayor me dijiste lo cual viniendo de tí creo que es completamente veridico.

Luego en mi refugio. La lluvia afura indica que será una tarde exclusiva para Bolaño.